miércoles, 29 de febrero de 2012

NO ES ORO TODO LO QUE RELUCE

La necesidad de mi hija de querer y ser querida es obvia, patente. Ella la expresa a los cuatro vientos sin pudor y sin miedo. Lo que me encanta. Y de igual manera le dice a quien sea que le importa un pito y no le quiere ni un poquito. 
Anoche, antes de dormirse me dijo: "mamá, quiero mucho a mi agüelo y el me quiere a mi también muchíiiiiiiiiiiisimo, que lo sé yo........ mañana se lo voy  a decir aunque se acuerde".
Sin embargo, toda esa capacidad de amar y de expresar su amor, no es suficiente para sentir seguridad en los afectos. La capacidad de reconocerse querida y de sentir el cariño de otros hacia ella no es bastante.
No es transtorno, ni me preocupa, ni ......... pero Xiao está desarrollando un apego inseguro ansioso, de los de libro. 
¿Llegará a ser seguro? pues no tengo ni idea. Con el tiempo, las lecturas y la observación de mi misma y de otros me ha llevado a comprender que apego seguro, lo que se dice seguro, no lo tenemos muchos, hijos biológicos criados y crecidos en familias amorosas. ¿Por qué? Ya me gustaría analizarme, ya...... pero no es de mi de quien he de hablar, ni de los que me rodean.
Sigo convencida de que estoy, estamos, en buen camino. Dificultades nos vamos a encontrar, eso está claro. Hay que asumirlas y asimilarlas, y cuanto antes mejor.
Afectivamente mi hija es un bombón, posiblemente por esa "inteligencia" emocional extraordinaria que tiene. Pero una parte de su afectividad y sus emociones, como fruto de su abandono y su institucionalización, están fuera de control.  Ni ella misma sabe qué le pasa cuando le está pasando. Yo trato de adelantarme, de reconocer los síntomas, pero no siempre es fácil verlo venir. Otras veces, como hace bien poco, me sorprende y me desconcierta. 
Tenemos un vínculo fuerte, muy fuerte y muy especial. Tenemos una relación íntima y entrañable, única, nuestra. Pero dentro de ella siempre habrá algún "cohete" que llame su atención y le haga perder el rumbo, aunque sea por unos instantes. Y mamá no se lo podrá evitar, sólo podrá ayudarla a encontrar el rumbo de nuevo. Espero que sea suficiente.



martes, 28 de febrero de 2012

EL AMOR ES MÁGICO

Una noche la semana pasada Xiao me descubrió que "el amor es mágico".
Tumbadas las dos en lacama me dice de pronto:
Mamá, el amor es mágico por que se cambia
¿Como es eso de que se cambia? Explicamelo......
Mira, mamá. Yo antes tenía mi amor mío y tu tenías tu amor tuyo. Y ahora que nos queremos se han cambiado con magia. Y yo tengo tu amor y tu tienes el mío. ¿Lo entiendes?
Creo que sí, hija, lo entiendo. Y me guardaré tu amor muy, muy dentro de mi corazón para que no se me escape nunca.
Vale, y yo el tuyo más dentro, más dentro también.

miércoles, 8 de febrero de 2012

UN TE QUIERO SIN DECIR

El día de mi cumpleaños eché de menos un mensaje. El mensaje o llamada que he recibido durante más de 20 años de una amiga. No me había fallado nunca. Pensé en la vida ajetreada que todos llevamos, en mil cosas y la escusé. Pocos días despues, 14 exactamente, fui yo la que fallé y no envié mi felicitación. Consciente de mi fallo me desperté el 15 de octubre pensando en ella y con la firme decisión de que no acabará el día sin felicitarla por su santo, que era ese día.
Hice más o menos lo que cualquier sábado. Baje, me hice un café, encendí mientras se hacía el ordenador y, con mi café ya en la mano, me senté a cotillear prensa, Facebook....... Cuando entro en FB me salen las "Últimas Noticias", aparecen publicaciones en muros de amigos. Leo una, otra, otra...... y de pronto vuelvo atrás. Lo primero que había leido estaba escrito en el muro de mi amiga y era un mensaje extraño ambiguo, recuerdo que pensé "jo_er, la gente a veces escribe cosas que ni que te hubieras muerto......." y una alarma se me encendió.
Entre en el muro de ella y lo que leí me abrumó. Sus amigos dejaban mensajes de condolencia, hablaban de echarla de menos, de añorarla, de ánimo para sus hijos y su marido............
Las lágrimas me quemaban y el llanto me ahogaba. No podía ser verdad, no me lo podía creer. Mi amiga, la más vieja amiga que conservaba, la amiga que sabes que siempre está ahí, aunque pasen meses sin hablar, se había muerto dos días antes; la habían incinerado el día anterior. ¡¡¡¡¡Y me enteré por Facebook!!!!!! Que fuerte, ¿no? No llegué a saber ni que estaba enferma.
Cuando puede articular palabra llamé a su marido y supe..... que un cancer la había fulminado en menos de 4 meses. Que no quisó decirlo y dar pena. Que el día de mi cumpleaños ya estaba tan mal como para no poder felicitarme, como siempre había hecho. Y si yo hubiera hecho esa llamada que siempre había hecho, me hubiera enterado de que mi amiga estaba fatal, estaba esperando morirse, consciente de su inminente muerte.
Es curioso que cuando vivía nunca la eché de menos; supongo que sabía que estaba allí y que podía hablar con ella o verla cuando quiesiera. Ahora que ha muerto y sé que no puedo, la echo enormemente de menos.
Nunca le dije que la quería, aunque sé que ella lo sabía. Pero me hubiera gustado decirselo. Es la segunda vez en mi vida que alguien se me va sin escucharlo de mi boca. Espero que no vuelva a pasarme.
¿Y por que cuento esto hoy? Pues no lo sé; pero me apetecía contaroslo. Y que le saquéis moraleja si es que creéis que la tiene.

jueves, 2 de febrero de 2012

EL TORO POR LOS CUERNOS

Antes de empezar a contaros quiero daros las gracias por vuestros comentarios. Siempre me ayudan, aunque lea cosas que en el fondo sé, ayudan muchísimo. Y ayuda especialmente sentirse arropada y comprendida.
Y dicho esto, al grano......
Ayer por la tarde, después de reocger a Xiao de casa de los abuelos, "cogí al toro por los cuernos" y me senté a hablar con ella.
Le dije que quería que hablásemos de lo que estaba pasando, del fin de semana y de su forma de actuar a la vuelta. Se hacia la sueca, sacaba temas "alternativos", vamos que salía por peteneras o por soleares pero no me dejaba entrar en materia.
Fue cuando le dije que me había dolido mucho lo que me había dicho por la mañana cuando me miró de frente y se centró en la conversación. Bajó la vista y me dijo, muy bajito, "lo siento, mamá, el cohete me obligó a decirte eso tan feo"...... y atravesé la barrera....... y poco a poco fue desgranando sus sentimientos del fin de semana.
Dijo frases, sueltas, escuetas, pero tan, tan cargadas de emociones y de sentimiento...... me dijo, muy al principio de la conversación, "te echaba mucho de menos y me asustaba, mamá, me daba miedo sentir eso".
También que por la noche se sintió sola, "soñaba que estabas a mi lado y me abrazabas y estaba calentita, pero me despertaba y estaba sola con T (su peluche) y entraba miedo", me dijo.
Hablamos, hablé, habló, lloramos, nos abrazamos mucho y se derrumbó. Hablamos de que esto es para siempre, de que siempre que se vaya la estaré esperando, de que yo también la eché de menos. Traté de explicarle que echar de menos es un sentimiento que puede ser agradable y bonito si sabes que la otra persona estará ahí a la vuelta. Pero sobretodo, le insistí en que puede hablar de esos sentimientos, de que es bueno decirlo en voz alta, para que "los cohetes no la molesten".
Su actitud ayer toda la tarde ya fue otra, más positiva, más cercana..... a ratos parecía un perrillo perdido buscando afecto.... y lo encontraba, por supuesto.
Por la noche, ya en la cama, en esos momentos en los que te vas a abandonar al sueño, me dijo: "mamá, tuve mucho miedo a perderte". Y abrazada a mi se quedó dormida, calentita, como dice ella.
Esta mañana me ha dicho que le iba a pedir perdón a la "ticher" por haberse portado tan mal ayer y haberle contestado. Y que hará lo mismo con la logopeda esta tarde.
A ver que me dicen ahora en el colegio, a ver como la veo, pero creo que la tormenta ha sido corta y no ha dejado muchos destrozos.
Y como habrá próximas veces..... veremos como reacciona.

miércoles, 1 de febrero de 2012

DESCONCIERTO

No sé muy bien por donde empezar, la verdad, por que estoy totalmente desconcertada.
El fin de semana de Xiao ha sido toda una experiencia, se lo ha pasado genial y, aparentemente, se ha sentido feliz. Pero...... hay un pero...... o un ciento, no sé.
Nuestro re-encuentro el domingo fue muy desagradable; me dió la espalda y dijo que no quería verme ni irse conmigo, lo mismo que con su padre. Y empezaron los desafíos. Desobediente hasta el límite máximo, contestona hasta la grosería, borde, arisca ....... una niña que no es mi hija.
Ya el mismo domingo por la tarde me dijo que quería que yo no fuera ya nunca más su madre, que prefería irse con los primos y que su tía fuese su madre. Tuvimos charlita, el rollo de que soy su madre para siempre, pque eso ni se elige ni se cambia. Que la vida en casa de los primos es así en fin de semana, que luego llega el lunes y hay colegio y logopeda........ que su vida no es siempre fiesta, vamos. Y que su tía también se enfada y exige.......
El lunes en el colegio la tuvieron que llamar la atención y me pidieron que entrase al terminar el horario escolar. Había roto (destrozado fue la palabra que usó la profesora) un puzzle por que la había regañado por estar contestona y rebelde.  Flipé..... esa no es mi hija....... La tarde del lunes un tormento. Una intensa sensación de que da igual lo que hagas o digas, que su actitud va a ser la misma, que se ha blindado y no hay resquicio para entrar.
El martes más de lo mismo. La psicóloga con la que trabaja por las tardes logopedia y apoyo para el colegio me preguntó qué pasaba: no había querido trabajar, pero desde el desafio, desde la chuleria y la altaneria. Que no había sido capaz de hacer lo que sabía hacer el jueves. Obvamente por que no quiso.......
Y hoy sigue igual. Cuando he ido al colegio a media mañana me ha montado un numerito espléndido. Ni sé por que ha empezado, quizá por que le he recriminado que segun he entrado me han dicho que mañana está castigada por que hoy lleva un día glorioso..... el caso es que me ha dicho a grito pelado que ya no me quiere, que ya no me va a querer nunca más, que soy la peor madre y que le importa un pepino (literal) lo que le diga por que no me a querer.
He respirado hondo, le he pedido que no diera voces, que me dijera lo que quisiera, pero tranquilamente, y que yo la quiero pase lo que pase y diga lo que diga.
Otra vez la misma expresión de "me importa un pepino que me quieras, no quiero que me quieras, quiero que me dejes en paz y no me quieras nunca, no quiero que seas mi madre..........." se ha vuelto a clase sin mirar atrás, llorando su rabia y su dolor y cargada de orgullo.
Y yo, rota y dolorida, desconcertada. No sé que ha detonado su dolor, su miedo y su sufrimiento; pero algo este fin de semana le ha removido. Y está sufriendo.
Me siento tan descolocada que no sé muy bien como reaccionar. Desde que ha vuelto por las noches no quiere hablar, ni que la toque. Rechaza el contacto físico y evita nuestra intimidad, esa de la que tanto hemos disfrutado las dos. Quiere que esté, eso sí, pero que no se note.
Hoy estaba previsto que la recogiera del colegio su abuelo y comiese con ellos. Y lo he mantenido. Dentro de un rato iré a buscarla.
Y veremos como toreamos este toro....... y saber ayudar a mi hija a volver.......